Tres bares con historia donde comer croquetas en Madrid
En el Día Mundial de la Croqueta, os recomendamos tres bares castizos de Madrid donde podemos tomar croquetas cremosas y de todos los sabores
Cualquier día es bueno para tomar croquetas, ya sea haciéndolas en casa o yéndonos a los bares de Madrid de toda la vida a pedirnos una ración para compartir o para nosotros solos.
Madrid es sinónimo de bares. De bares con historia donde podemos probar algunas de las mejores delicias de nuestros platos, y las croquetas no pueden faltar en estos enclaves históricos.
Por eso, os recomendamos 3 bares con historia en Madrid donde podemos comer muy buenas croquetas.
Casa Julio
El barrio madrileño de Malasaña esconde un bar onde podemos tomar una de las mejores croquetas de Madrid. Casa Julio es un local bastante pequeño conocido por sus croquetas, que podemos pedir media ración (seis en total) o la ración entera (12 en total). Para gustos, sus sabores: de jamón, morcilla con membrillo, espinacas con pasas y queso gorgonzola, queso azul, setas con puerros, bonito con huevo y cebolla caramelizada y picadillo.
El bar nació en 1921 y fue fundado por Julio Gil, para más adelante pasar a manos de su hija Maite. Desde entonces, esta taberna castiza de Madrid lleva abierta más de 100 años preparando croquetas, bravas, ensaladilla rusa, pisto o albóndigas. Por Casa Julio han pasado celebridades como los miembros de la banda de U2 o el literato José Saramago.
Encuentra un sitio en la barra o en una de sus pocas mesas, ¡pero no te vayas sin probarlas!
Ubicación: C. de la Madera, 37, 28004 Madrid
Casa Labra
Si eres un amante del bacalao y todavía no conoces Casa Labra, este bar va a convertirse en uno de tus sitios favoritos de Madrid para tomarte el aperitivo. El Labra es conocido por dos motivos: por ser la casa fundación del Partido Socialista Obrero Español y por preparar las mejoras tajadas y croquetas de bacalao de todo Madrid.
El bar fue fundado hace más de 160 años y es perfecto para tomar a pie de calle, al lado de Sol, un aperitivo rápido. Para pedir, tendrás que hacer cola en un mostrador en donde podrás pedir tanto bacalao frito como sus croquetas. En la barra es en donde se pide la bebida. Pero si quieres sentarte y degustar otros platos, también tienen la opción de restaurante para comer deliciosas carnes y pescados.
Ubicación: C. de Tetuán, 12, 28013 Madrid
Bar Melo’s
Un clásico de los bares de Madrid. El Melo’s es conocido por dos de sus platos: uno es su zapatilla, un bocadillo gigante de queso de tetilla y lacón; y otro es sus croquetas, grandes, de lacón y muy melosas -ya nos lo advierte su nombre-.
El Bar Melo’s es un bar de Madrid de toda la vida. Con una carta reducida, con colas durante el fin de semana, ya que no se puede reservar. Pero no os asustéis, ya que la espera es corta porque hay mucha rotación de comensales
Si estás por Malasaña y tienes antojo de sus croquetas, estás de suerte, porque toda la tradición del Melo’s lo han trasladado al bar Los Malos. Los dueños actuales del Melo’s han abierto este bar que mantiene los mismos platos y el mismo sabor de siempre.
Ubicación: C. del Ave María, 44, 28012 Madrid