Sushi y parilla japonesa en Robata, el izakaya contemporáneo del barrio Salamanca
Fabiola Lairet, una de las primeras sushi chefs del mundo, está al mando de este restaurante donde reina el sushi y el grill
Un izakaya cosmopolita, en el que las técnicas de sushi son las protagonistas, pero en el que también cabe la creatividad y la innovación en la comida japonesa. Robata, el japonés que en enero de 2024 cumplirá un año en Madrid y que lleva un largo recorrido en la ciudad condal, es el restaurante de sushi y parrilla nipona que tiene que estar en nuestro radar.
Ubicado en la icónica calle Puigcerdá, el callejón de Jorge Juan, Robata se posiciona como uno de los restaurantes japoneses donde poder degustar uno de los mejores sushis de Madrid. Prueba de ello es la chef que lo capitanea, Fabiola Lairet, una de las primeras mujeres sushi chefs del mundo, y es que fue la número 75 de 800 en conseguir el Sushi Proficiency Certificate, expedido por la All Japan Sushi Association.
Lairet, formada con Andy Matsuda en EE.UU., creador del Sushi Chef Institute, y en la Tokyo Sushi Academy de Japón, ha creado con Robata un concepto de izakaya moderno, en el que comer o cenar con amigos o pareja, y en donde prima la calidad del producto, la técnica y como no, la robata, las brasas japonesas que originariamente usaban los pescadores para cocinar su comida.
Sushi & Grill en Robata
Sushi y grill, los platos que no nos podemos perder si venimos a comer a Robata. Con una gran variedad donde elegir, desde el mítico california roll o el wakame rolls hasta el SexyTuna, compuesto por atún, fresa y queso crema con cobertura caramelizada. Los nigiris son una de sus especialidades, con producto de una altísima calidad y el corte idóneo para crear una pieza de sushi perfecta. Atún toro, anguila, toro y foie caramelizado, SpicyTuna Gunkan… Nigiris riquísimos en los que los toques ahumados están muy presentes.
Entre el resto de opciones de la extensa carta de Robata encontramos platos poco comunes de ver en restaurantes japoneses en España, como la Okonomiyaki de mariscos, la típica tortilla al estilo de Okasa, que incluye verduras y mariscos, pero también otros platos a los que estamos más acostumbrados, como el pato caramelizado o el espectacular tataki de atún toro soasado.
No podemos marcharnos sin probar alguna de sus especialidades en las brasas. Tenemos para escoger carnes como pollo, solomillo o secreto, pescados como el salmón, o vegetales como la mazorca de maíz, espárragos o pimientos del padrón.
Robata ha llegado a la capital para quedarse y ser uno de los mejores japoneses de la capital.
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